03 septiembre 2006

Il ritorno del dolce far niente

Hola de nuevo..... SÍ, despues de tanto tiempo, he decidido recuperar este blog.

No es que estuviera olvidado, es queeeee no me apetecia.

Al entrar despues de este lapso tan largo de tiempo, casi no consigo acceder a la cuenta,

y es que ha cambiado la cosa desde la ultima vez.

Para abrir boca y como testimonio de que tenia muchas cosas en mente en este mi blog dejo una reseña que tenia pensado publicar halla por septiembre de 2006.
Por eso la fecha es de entonces, aunque hoy sea 18/12/2007.

Me a dado penita borrarlo, asi que lo dejo para la posteridad.

Tambien comprobais de esta manera, lo repentino y curioso que es esto de blogear.

Tan pronto lo dejas, como lo retomas de la noche a la mañana.

Prometo escribir y muy pronto. Tengo muchos temas en el tintero de mis cuadernitos, los pondre al dia y les dare via libre.

Bueno y sin mas rodeos ni dilacion, os dejo con el "pasado", mio claro, para vosotros ahora presente en sus dos acepciones mas conocidas.

Un regalo de mi pasado, para vuestro presente. Ojala os entretenga.

Ciao.

Il dolce far niente y la dolce vita; quizás las dos soliloquios mas conocidos de Italia, de los mas antiguos y encima a pesar de ello aun continúan siendo verdaderos (o casi).
Si amigos, tras este paron estival tengo tantas cosas nuevas que contaros que casi no se por donde empezar.
Creo que como siempre haré una pequeña mezcla a lo James Bond, agitado no revuelto.
Lo primero es lo primero y comenzare por donde todo el mundo, mis vacaciones.
Si habéis acertado, he estado en Italia, un país con muy mala prensa. Dicen que los italianos son chulos, bordes, esnobs, soberbios y creedme tienen bastante razón; ahora bien, si yo viviera allí, si yo fuera italiano, si al levantarme por las mañanas aun en pijama, asomándome por la ventana viera un espléndido cielo azul y el sol reflejado en las aguas del gran canal, en el mármol del duomo o en alguna obra de Miguel Ángel o en cualquiera de los cientos de maravillas de este país, creedme, yo también seria el mas orgulloso de los hombres.
Pero vivir así seria la muerte, no podría subsistir, no me extraña que tantos y tantos italianos emigraran de su amado país. Vivir allí es una eterna lucha por no deslucir.
Rodeado de gente bien vestida y con un enorme gusto por la estética, bebiendo en fuentes publicas de cualquier esquina diseñadas por un maestro del seicento y todo pulcro y aseado, ciertamente moriría.
En un país donde cualquier edificio es hermoso, toda mujer tiene mucha clase y es hermosa, todo escaparate es un placer y toda ropa es hermosa, todo coche ronronea como un felino, es rojo y hermoso, todo café, helado o dulce esta limpio , es bueno , y esta decorado de manera hermosa y todo paisaje con su roja tierra, sus viñas, sus pinos, olivos y su río es hermoso, pues que queréis que hos diga, no tendría tiempo mas que para estar tumbado con los ojos abiertos como platos intentando abarcar sin éxito tanta belleza en cualquier terraza de cualquier plaza y disfrutando del far niente. Vamos eso arruina el carácter y el bolsillo de cualquiera.



Todo el mundo me decía que Italia era muy cara que el nivel de vida es muy alto.
Yo os digo, Italia NO es cara, el problema que al estar llena de vicios y tentaciones te dejas una pasta infame en comer bien y abundante en elegantes ristorantes, beber buen vino de la Toscana fragante y delicado como si de simple zumo de uva se tratara por lo bien que entra, comprarte las camisas siempre hermosas y con estilo del mas fino hilo italiano en las hermosas tiendas atendidas por las mas hermosas y agradables mujeres de Verona, tomarte un tartufo en la plaza Navona de Roma mientras observas como beben las palomas en las fuentes de Bernini, pasear por los canales de Venecia tomando champagne mientras observas el palacio del oro y te cantan el O sole mio y te envicias a comprar libros en cualquiera de los cientos de mercadillos de libros antiguos, como el de la plaza frente al panteón de Roma por ejemplo.



Así que resumiendo vivir en Italia es convertirte en un vividor y en un tipo orgulloso y arrogante que desprecia a cualquiera con la falta del más mínimo gusto y estilo de vida. Vamos lo que les pasa al 85% de los italianos.

CONTINUARA…..